Como motero y aficionado a las dos ruedas y a la fotografía, decidí mezclar mis dos pasiones y en ese momento nació el fotero barbudo.
Nadie conoce mejor que un motero la sensación de libertad que provoca el aire libre sobre dos ruedas, y lo importante que puede ser para nosotros inmortalizar esos momentos,.
¿Hay algo mejor que acabar la semana rodeado de amigos con las mismas aficiones?
Cada ruta es única e irrepetible, fortalece amistades y llena nuestra memoria de momentos inolvidables.
Crea un álbum que puedas enseñar orgulloso a las siguientes generaciones.